Cecilia Alarcón, Directora de Carreras de la Escuela de Salud de Duoc UC Sede Valparaíso.
Con la llegada de la primavera comienza a asomarse el sol, los días se tornan más cálidos, verdes y coloridos por la naturaleza que inicia un nuevo ciclo luego de las lluvias del invierno, trayendo consigo un renovado aire y -a su vez- las temidas y desagradables alergias que afectan a gran parte de la población.
Las alergias estacionales son una consecuencia de la presencia de polen durante el proceso de la polinización de árboles y flores, entre los meses de septiembre y noviembre. En Chile la aparición de pólenes de plátano oriental, álamo, pasto, maleza, entre otros, los convierte en la principal culpable de estas molestias respiratorias.
En general hay una tolerancia normal hacia la presencia de polen, sin embargo, algunas personas tienen una predisposición genética que se manifiesta como una reacción alérgica, denominada Atopia. En palabras simples, puede ser una tendencia familiar o personal para producir anticuerpos IgE en respuesta a alérgenos como el polen. La Atopia no significa enfermedad alérgica, sino tendencia aumentada a desarrollarla.
¿Cuál es la sintomatología?
Inflamación de las membranas mucosas de la nariz, manifestándose como estornudos, congestión nasal, picazón en la nariz, paladar, oídos, garganta y ojos. En algunas ocasiones puede generar problemas respiratorios.
Tips para prevención la sintomatología:
A modo de recomendación sugiero a las personas propensas a las alergias que busquen mejorar su calidad de vida, seguir las siguientes indicaciones:
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Lavar ropa de cama en forma periódica y a alta temperatura.
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Evitar alfombras, peluches, libros y otros objetos que acumule polvo en dormitorio.
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Usar lentes de sol al salir para evitar así la exposición de los ojos.
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Viajar en auto con ventana cerrada y colocar un filtro para pólenes en el aire acondicionado.
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Lavar el cabello frecuentemente, sobre todo después de hacer actividad al aire libre los días soleados y ventosos.
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Mantener las ventanas y puertas cerradas de la casa durante el máximo tiempo posible. Eso sí, es importante renovar el aire idealmente ventilar la casa tras la caída del sol, o a medio día, cuando la polinización es menor (5-10 minutos es suficiente).
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Usar la aspiradora en vez de la escoba para barrer y aspirar la casa de manera exhaustiva por lo menos 2 veces a la semana.
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Para la limpieza de muebles siempre utilizar paños húmedos, nunca con plumero.
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Evitar salir en días secos y con viento.
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Mantener las mascotas fuera de la cama y habitaciones durante esta temporada.
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Coloca fundas anti-ácaros de plástico para recubrir y aislar colchón y almohada.
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No fumar y no frecuentar lugares con mucho humo.
Ahora bien, si a pesar de tomar todas las precauciones antes señaladas, los problemas continúan y son de gran compromiso respiratorio, es aconsejable consultar con un médico debido a que en algunas ocasiones es necesario el uso antihistamínico y corticoide para aliviar la sintomatología.