El avance de la tecnología y su incursión en todos los aspectos de la vida cotidiana, de los negocios y la industria, así como la constante búsqueda de automatizar los procesos y las acciones cotidianas y su aplicación en la vida de los ciudadanos, ha llevado a desarrollar el concepto de domótica para el hogar.
En concreto, la domótica para el hogar se refiere a transformar la casa en inteligente o Smart, término utilizado en la actualidad y que, probablemente, has escuchado en alguna ocasión.
Beneficios de automatizar inteligentemente una vivienda
Domotizar una vivienda supone lograr numerosos beneficios. Los principales giran en torno a:
● Una mayor eficiencia energética al programar tus interruptores inteligentes
● Optimizar los tiempos de las actividades diarias al programar acciones para que se realicen sin asistencia humana
● Elevar la calidad de vida de sus habitantes al delegar las tareas repetitivas y rutinarias
Aspectos esenciales para tener una casa inteligente
A la hora de implementar la domótica para el hogar es recomendable atender a los siguientes aspectos:
● Los servicios deben integrarse adecuadamente a las estructuras de la vivienda
● La estructura, infraestructura y los sistemas montados deben ser capaces de poder actualizarse y poder incorporar nuevas funcionalidades
● La posibilidad de poder reprogramar todo o parte del sistema ante una falla o imprevisto para adecuarlo a un mejor funcionamiento
● Completa compatibilidad con todos los formatos de información que puede llegar a recibir el sistema para lograr una adecuada comunicación entre los distintos dispositivos que lo componen
Ecosistemas para integración
A la hora de automatizar, debemos evaluar qué ecosistemas vamos a elegir y cuál tiene mejor y mayor integración con dispositivos de terceros. Actualmente, hay tres ecosistemas bien definidos: el de Google, el de Apple y el de Amazon. El secreto reside en buscar cuál de ellos se adecúa mejor a tus necesidades y se integra con dispositivos de terceros para lograr una automatización todo en uno, evitando el funcionamiento individual y por separado de cada sector que compone el sistema.